Seguirías teniendo parte de la empresa, pero no cotizarían y sólo podrías venderlas en contrato privado. Además tu broker te cobraría custodia de acciones no cotizadas (caro). No habría dividendos.
Siempre se recomienda vender en una opa de exclusión. El asunto está en que si no vende un porcentaje significativo tendrán que subir el precio en la OPA.