Andrés Allende escribió en el Blog de COBAS el 24/08/2018
Finalmente, la venta de inversiones fallidas, de errores, es la mayor prueba de humildad. Un error será algo cuya tesis de inversión no se va a cumplir y donde no se va a ganar dinero, o donde ha aumentado el riesgo de perderlo. Lo importante es que el trabajo de campo, el proceso, haya sido sólido, para poder acertar muchas veces y fallar pocas. Pero emocionalmente es doloroso e inconscientemente todos lo interpretamos como que “el trabajo se ha hecho mal”. Por ello la naturaleza humana crea multitud de barreras y sesgos de comportamiento, como aversión al riesgo, sesgo de confirmación y de representatividad, sesgo de familiaridad y muchos otros. Dicho lo anterior, también hay que ser capaz de aceptar un error, “resetear el contador” y ver cada inversión como lo que es a día de hoy – tal vez un error pasado ofrezca una gran oportunidad a día de hoy. O tal vez no. Lo importante es librarse de las emociones, otro rasgo de carácter importante para invertir. En el mercado las huidas hacia adelante, los faroles y los órdagos a la grande no funcionan. Sólo el trabajo detallado, el carácter – aguante y humildad – y la paciencia.
No se si puede ser un aviso a navegantes respecto a Arytza lo que ha podido comunicar COBAS de manera indirecta, hace solo una semana
Yo ayer vendí con muy poca plusvalia por si las moscas